La viabilidad económica es esencial para poner en marcha un negocio y la financiación es el combustible que necesita cualquier proyecto empresarial para continuar creciendo.
Es habitual que las personas emprendedoras, las pymes y los trabajadores autónomos financien sus negocios con fondos propios, pero ante una situación de cambio, crecimiento o dificultad, puede ser necesario contar con financiación externa para mejorar tu flujo de caja y ayudarte a lograr muy diversos objetivos: desde cubrir gastos operativos, hasta realizar inversiones de mejora, incrementar la rentabilidad del negocio o pagar deudas, entre otros.
Existen diferentes tipos de financiación a las que puedes acceder: financiación bancaria, financiación pública, inversión privada y crowdfunding. Es importante valorar los pros y contras en cada caso antes de tomar una decisión.
Descubre cuál es el tipo de financiación más adecuada para ti.